La curva de la “betatización” de un hombre en una relación de pareja.

Introducción

La filosofía Red Pill observa que la dinámica de una relación para muchos hombres sigue la "curva de la betatización". Esta curva busca definir el declive del poder del hombre en la relación. Actualmente en la sociedad hembrista en la que vivimos donde las mujeres tienen a los medios de comunicación, los políticos y las leyes a su favor es muy difícil escapar para un hombre de esta tendencia. Todas las mujeres vienen con este programa instalado de serie. Una vez que el proceso comienza, no puede detenerse.

En esta entrada vamos a analizar los puntos críticos de este proceso para que seas capaz de reconocerlos y actuar en consecuencia, para intentar en la medida de lo posible evitar o ralentizar su impacto. Existen ciertos puntos específicos en la relación que determinarán la velocidad de la "curva de la betatización".

Objetivos de ella.

Es un proceso que comienda justo después de que la mujer ha abatido a machos más débiles y comienza su relación con el macho alfa. Este proceso tiene dos objetivos.

- La necesidad de comprobar de vez en cuando que su hombre sigue siendo alfa.

- Transformarlo a su hombre alfa en beta, para asegurarse de que le será exclusivo.

Objetivos del hombre.

Así que la labor del hombre en una relación es: ¡no dejar nunca que ella tenga éxito en betaizarte! Esto implica ser consciente de sus intentos de betaización y darle las respuestas correctas. Tu objetivo son los siguientes.

- Hacer que la parte de los "buenos tiempos" dure tanto como sea posible, echando mano de los recursos y contramedidas.

- Entender que lo que una mujer dice o hace en una relación no es siempre lo que ella realmente quiere. Esto para muchas mujeres es generalmente inconsciente como mencioné, realmente no están mintiendo, sólo actúan bajo la influencia de instintos muy fuertes, que contienen la contradicción.

Riesgos del proceso de “betatización”.

Este proceso es extremadamente peligroso para la relación, y uno de los más peligrosos destructores de atracción para la mujer, si el hombre no sabe cómo tratarlo. ¿Por qué?. Porque si el hombre, de alguna forma, consiente en ser betaizado, ella perderá cualquier atracción que tuviese por él. Así que la paradoja es: lo que la mujer quiere en el proceso de betatización es exactamente lo contrario de lo que ella le está realmente haciendo.

Etapas

La "curva de la betatización" es un fenómeno que se genera en forma gradual. En cada etapa existen ciertas medidas que se pueden aplicar, que pueden resultar en tres posibles resultados: final de la relación, ralentización del proceso y aceleración del proceso. Las etapas de la "curva de la betatización" son las siguientes.

- Exclusividad forzada.

- El marcaje de territorio (de ella).

- La denegación del sexo.

- La pérdida del respeto.

Exclusividad forzada.

En el periodo de exclusividad forzada, la mujer deja totalmente claro que no tienes permitido tener intimidad física ni emocional con ninguna otra; exteriorizando dicha norma y condicionándote que de romperla también perderás la relación. La mayor parte de los hombres caen con facilidad en esta trampa. No es más que test que las mujeres usan en forma inconsciente para averiguar si eres tan alfa como dices ser.

El marcaje de territorio (de ella).

Este es el punto en el que se solidifica la exclusividad por medio de ciertos patrones de comportamiento. Este tipo de comportamiento puede parecerte entrañable o incluso adorable. Pero no te equivoques: ella está preparando el camino para llevarte a donde le interesa, un paso más allá en el proceso. A continuación, describo ejemplos.

- Ella irá dejando cosas de su propiedad en tu habitación, como bisutería, objetos personales, etc…

- Buscará cualquier excusa en la interacción que tengas con una mujer, por nimia que sea, y sacará las cosas de contexto para que te justifiques y las evites o reduzcas (algo que podrías haber evitado si no hubieras entrado en exclusividad).

Primera denegación (con éxito) de sexo

La mujer sabe que, si quiere que un hombre pase tiempo a su lado, ella debe de dar sexo. Sin embargo, conforme vayas avanzando en la curva, irás invirtiendo cada vez más en ella, y ella se dará cuenta de que un día que puede denegarte el sexo. Hasta ahora tú has ido aceptando el trato basándote en la idea de que ibas a obtener sexo a punta pala, pero ahora eso parece que se está acabando. Esta etapa es la última de los "buenos tiempos".

Faltas de respeto continuas.

Esta etapa es el comienzo de los "malos tiempos". Aquí es donde los malos modos y las broncas son contínuas. Ella puede comenzar a quedar menos contigo o a eliminar lo poco de sexo que hasta hace poco te daba. Llegados a este punto no hay retorno. Todo lo que puedes hacer es capear el temporal como puedas para que la cosa no vaya a peor. Y si lo que quieres es que vuelvan los "buenos tiempos", búscate otra mujer.

Los síntomas son los siguientes:

- Puede comenzar a tratarte como un amigo o un niño.

- Puede comenzar a inmiscuirse en tus hobbies para que en su lugar hagas cosas por ella, etc.

- Puede insinuarte relaciones o flirteos para ver como reaccionas.

- Salir más frecuentemente con sus amigas en lugar de contigo.

Dilema

La pregunta es, ¿qué es más importante para ti, la comodidad que te otorga una relación o la libertad de no ver tu comportamiento o tu espacio mental comprometido por circunstancias que tú mismo has creado? Eso es algo que solo tú puedes decidir.

Conclusión

- Muchos opinan que una vez que el proceso de betaización comienza es imposible detenerlo. No es mi caso. Considero que no es un proceso sencillo recuperar tu marco de premio, pero es posible hacerlo.

- Las ideas Red Pill desmitifican el matrimonio, revelando que para la manoesfera ya no es rentable en el análisis riesgo-costo-recompensa.

-Este movimiento de oposción al feminismo moderno está en su etapa inicial. Las ideas "Red Pill" podría extenderse de manera exponencial a través de la generación actual de los hombres jóvenes. El efecto primario: disuadirlos de casarse. Esto cambiaría la vida de su generación de mujeres cuando estas mujeres deciden establecerse cerca del “muro”.